La Virgen del Carmen durante su besamanos. |
La Virgen del Carmen del Santo Ángel ha estado
expuesta en besamanos durante el puente de Todos los Santos. Durante cuatro
días, del 1 al 4 de noviembre, la Virgen ha permanecido en su capilla
sosteniendo entre sus brazos al niño Jesús, vestido de forma similar a la
Madre. Manuel Lorence, Prioste de la hermandad: “Está vestida de monja,
normalmente la ponemos en este mes. Como es también intercesora de las ánimas,
el besamanos empieza el día 1 y está todo el mes expuesta así en la capilla”.
El horario del besamanos ha coincidido con el de
apertura del templo, pudiéndose visitar de diez y media de la mañana a una y
media de la tarde y de seis y media de la tarde a nueve menos cuarto de la
noche. La afluencia de devotos ha sido mayor los minutos después de la celebración
de las misas en el templo, tal y como asegura Manuel Lorence.
La Virgen del Carmen ha recibido a sus devotos en la
capilla que preside durante todo el año, que ha sido exornada especialmente
para la ocasión. La Hermandad de la Estrella, con la que existen unos vínculos
especiales, ha prestado para el besamanos unos faroles. Lo demás pertenece a la
propia Hermandad de la Virgen del Carmen. El prioste de la hermandad cuenta
algunos de esos detalles: “Las flores son crisantemos, que es típico la fecha
esta; tenemos arriba un cuadro de las ánimas, los cuatro faroles, y el Santo Ángel
en plata también del paso de la Virgen”.
Nuestra Señora del Carmen es una talla anónima del
siglo XVIII, al igual que la del niño Jesús, anónima también, pero
perteneciente al siglo XIX. Ambas son veneradas en la Iglesia del Santo Ángel,
situada en la calle Rioja de Sevilla.
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Redacción: Sandra Valdés.
Fotografía: Cruz Alzada.
Fuentes: Sandra Valdés, Arte Sacro, Archicofradía de Nuestra Señora del Carmen, Manuel Lorence.
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